Hoy voy a compartir la salsa de tomate para pizza, que formará
parte de una series de artículos sobre la Salsa de Tomate y sus variantes.
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¿Compraste la salsa más barata -la que viene en botella, la de tretra- o tenés unos tomates a punto de morir y querés
aprovecharlos?, la receta que te voy a enseñar te permite transformarles en ricas
salsas. *Fin espacio *
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLJK6Pah3pH_SFJ6KHKK9yOVWOxUk7fX9enKQiSfqG3zL5xNDw_P6u1zUcva34zaDgCpIxfBMeltiPM73HRCAO-ncXQTavR6was6gA-AEBsWyp6PPJwc4IIQcGiaiQykzZgjt7Nuwiuit5/s1600/salsa-de-tomate-para-pizza.jpg)
La más básica, pero no
por eso fácil
La salsa para pizza es la más básica porque sólo lleva tomate,
especias, sal y agua. Pero son las especias las que guardan el secreto de una
buena, una mediocre o una mala salsa.
Es muy importante que con el tiempo aprendas los sabores y
los olores de las especias como también sus combinaciones. Cada quien encuentra
ciertas algunas imprescindibles en sus comidas (en mi caso es el orégano,
diferentes pimientas y nuez moscada) e incluso las que le da un sello característico, ese "secretito" que yo le cuento a quien quiera y pregunte.
Volviendo a la salsa, el camino más fácil en cuanto a
especias es comprar la Mezcla para Pizza que ya viene preparada, le
agregás sal, un poco de azúcar, unos 200ml de agua y la dejamos que se cocine
por al menos 30 minutos a fuego medio*. Pero veamos el tema de los ingredientes:
Ingredientes
- Puré de tomare: puede que la encuentres también como salsa de
tomate, puede venir en botella o envase tetrabrik, incluso en sachet. Podés optar por tomates
frescos, lavados y pelados (4 si son tomates redondos de tamaño medio y 6 si
son peritas). La preparación varía si elegís la de los tomates frescos.
- 1 cucharada sopera de Aceite (puede ser de maíz, mescla u
oliva).
- 200ml de agua.
- ½ cucharadita (de té) de sal fina. .
- 1 cucharada sopera colmada con orégano (seco) .
- 1 pizca de pimienta.
- 1 pizca de ají molido.
- 1 cucharadita al raz (de té) de pimentón dulce.
- 1 cucharada sopera colmada de azúcar (o mascabo, que es el
azúcar sin procesar).
Primero colocás en una sartén el puré de tomate o los
tomates pelados y cortados lo más chico posible. Le agregás la mitad del agua y
comenzás a revolver. Cuando comienza a largar vapor, tenés prestar atención
porque no da que se queme.
En el caso de los tomates frescos se les agrega más agua para enfriar y mantener por más tiempo el proceso de cocción. Cuando comienza a formarse como unas burbujas que explotan y largan vapor (no se la crean que tampoco es tan espectacular) es el momento de bajar el fuego a mínimo y comenzar a condimentar.
Primero poné la sal y revolvé; luego poné el orégano y revolvé, pimienta y revolvé, ají molido y pimentón dulce y revolvé. Esperás unos 5 minutos antes de agregar el azúcar, mientras revolvés para que el tomate vaya tomando los sabores de las especias. Si te pinta, le podés poner un poco de albahaca (seca o fresca), pero es mejor guardarla para agregarla arriba de la pizza.
En el caso de los tomates frescos se les agrega más agua para enfriar y mantener por más tiempo el proceso de cocción. Cuando comienza a formarse como unas burbujas que explotan y largan vapor (no se la crean que tampoco es tan espectacular) es el momento de bajar el fuego a mínimo y comenzar a condimentar.
Primero poné la sal y revolvé; luego poné el orégano y revolvé, pimienta y revolvé, ají molido y pimentón dulce y revolvé. Esperás unos 5 minutos antes de agregar el azúcar, mientras revolvés para que el tomate vaya tomando los sabores de las especias. Si te pinta, le podés poner un poco de albahaca (seca o fresca), pero es mejor guardarla para agregarla arriba de la pizza.
Primero colocás el sobrante de agua (fíjate que la salsa
debe ser más bien líquida, pero con consistencia de crema). Acostumbrate a ir
oliendo la salsa (y cualquier comida que hagas), porque es una manera de
aprender sobre condimentos y te va a ayudar en el futuro a identificar errores
y solucionarlos. Mezclás la salsa para que se una al agua y luego colocás el
azúcar. Revolvés durante un par de minutos y luego dejás la salsa sobre el
fuego al menos 10 minutos más. En ese tiempo podés ir encendiendo el horno y
preparando las prepizzas.
Un consejo, dale un golpe de horno a las prepizzas. Metelas por un ratito para que pierdan parte de la humedad de haber
estado empaquetadas. Lo mejor sería que se seque un poco la parte de abajo y
que quede un poco crujiente, pero recordá que luego van a pasar varios minutos
en el horno. Si querés podés hacer éste proceso luego de ponerle la salsa, así
queda blandita arriba y crocante abajo.
Cumplidos los 10 minutos apagás el fuego y probar la salsa para ver
cómo quedó antes de arruinar una prepizza. Fijate si le falta algo, aunque
deberías andar bien. La dejás reposar por 5 minutos. Luego la mezclás de nuevo
(para contrarrestar el efecto de decante) y colocás una capa fina de salsa
sobre la prepizza. Es como si pintaras con un pincel pero exagerando la
cantidad de pintura. Para pizzas simples, van a tener que esperar un poco, pero
ya llegarán algunos post.
A mí me gusta preparar la salsa para pizza más al estilo
filetto (salsa para pastas) porque soy amante de la cebolla y porque el ajo es un ingrediente muy presente en mi cocina. A veces
rallo zanahoria con la opción más finita (que quede en una proporción de 1,5puños y se lo agrego luego de haber desflemado las cebollas** y las cocino por unos 8 minutos
más mezclando bien los ingredientes. Luego coloco el tomate.
Bueno, después les paso más recetas de salsas para todos los
gustos y para una vida simple.
Buen Provecho!!!
Nota
* En las cocinas hogareñas es el fuego más
fuerte de la hornalla más grande, ya que la misma nos permite controlar la
temperatura con facilidad.
** Desflemar es poner
las cebollas cortadas pequeñas en una sartén con un chorrito de aceite -1
cucharada sopera es suficiente- de oliva o maíz hasta que queden transparentes
y comiencen a tomar un color dorado caribeño.
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